jueves, 7 de marzo de 2013

CAPÍTULO 16: OZ, EL COMIEZO.

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CAPÍTULO 16: OZ, EL COMIEZO.

Comenzamos a andar por aquel hermoso prado verde en el cual se veía un frondoso y coloreado bosque justo en frente nuestra, el cielo se encontraba azul claro y el sol brillaba con mucha intensidad, hace bastante calor, pero es una sensación de paz lo que siento dentro de mí, puedo escuchar los pajaritos revolotear y me quedo parado, cierro los ojos por un instante y escucho la melodía de la naturaleza, no hay mejor sitio que éste sin duda para meditar y pensar tantas cosas...

 Abrí los ojos de nuevo y nos adentramos en el bosque. Mientras caminábamos entre los árboles, el sol se iba perdiendo poco a poco y de entre las ramas de los árboles pequeños rayos de sol se filtraban haciendo juegos de luces y sombras junto con los colores tan hermosos que los árboles y las plantas poseían. Podemos ser testigos de la magia y de la vida que en su interior hay, justo en frente de nosotros nos encontramos con un ser hermoso y mitológico, la dama del bosque. Era una mujer que nacía del tronco de un gran árbol, tenía el cuerpo cubierto de flores y musgo.

 Era hermosa, jamás había visto nada parecido. Nunca pude imaginar tanta belleza, sin lugar a duda era la madre naturaleza personificada. Su cabeza se encontraba unida en el tronco de aquel antiguo roble y su cuerpo estaba recostado en el suelo, cubierto por musgo, piedras y flores de todos los colores, todo aquello le hacía un hermoso vestido de palabra de honor, realzando su hermoso pecho que parecía incluso estar descubierto si no fuera por las piedras que rodeaban los filos del vestido simulando piedras preciosas decorativas en un vestido normal, alguna que otra seta nacía del vestido haciéndolo más natural y más vivo. 

El cielo estaba completamente azul, justo encima del roble se podía percibir aquel claro y transparente cielo, los pájaros cantaban y revoloteaban de un lugar a otro. A lo lejos en la montaña podía apreciarse el castillo de Oz. Aquel bosque era mágico y lleno de luz y vida, sin lugar a duda era un verdadero Edén.

-Hola,¿en qué puedo ayudaros? Nos decía la madre naturaleza.

-Hola, Gea cuánto tiempo. Decía Dorothy.

-¿Dorothy?, ¿eres tú?. Respondió.

Las facciones de su cara marcaban una hermosa sonrisa llena de emoción y de sus ojos manaban lágrimas de alegría. Era simplemente hermoso y muy emotivo.

-Sí, he venido con un amigo, hemos cruzado un portal que ha aparecido en nuestro mundo. Y nunca pensé que fuera a llegar hasta aquí. Me alegra muchísimo el volver a verte. Sigues igual que siempre, tan hermosa y tan fértil.

Sonreía emotiva Dorothy tras terminar de hablarle, me sentía tan feliz viéndola reencontrándose con su vieja amiga. Hacía tiempo que no la veía tan feliz.

-Gracias querida, tú has crecido mucho, debes de saber que Oz está muy mal, la obscuridad está llegando a éste mundo y él no tiene fuerza para luchar. Debes de saber que el fin se está acercando. Y yo ya no tengo tanta fuerza para dar vida, las tierras se están contaminando en vuestro mundo y me están destruyendo lentamente.
La pobre Gea entristecía y agachaba la cabeza.

-Es muy triste escuchar los lamentos de la tierra que nos ha dado la vida, somos muy crueles contigo y no mereces éste dolor que tanto te hemos causado. Decía Edgar.

Me acerqué para poder contemplarla mejor, podía percibir el fresco aroma a naturaleza, y la humedad del ambiente refrescaba mi rostro acompañado de una suave y delicada brisa.

-Tranquilo pequeño- decía mientras se giraba un poco y me acariciaba con sus grandes y finas manos. -No sólo vuestro mundo es culpable de las desgracias que recaen sobre mí, mis raíces recorren miles de mundos que se encuentran en todas las dimensiones. Y es mucho peso el que cargan mis espaldas, pero estoy orgullosa de poder dar luz y vida a todo lo que hoy veis y mañana verán vuestros descendientes. Debéis marchar a palacio, y creo que vais a tener que aprender a usar algún que otro poder para poder ayudar a Oz. Nos decía Gea.

¿Poder?, no entiendo nada, ¿se referirá a magia? Cómo va a ser posible eso, si yo nunca he tenido tal don. Siento un gran dolor en mi pecho, me siento tan mal por el daño que el ser humano causa al mundo. No deberíamos de ser tan crueles con algo tan maravilloso como es éste mundo.

-De acuerdo, nos pondremos en marcha ahora mismo. Respondió Dorothy.

Nos despedimos de Gea y comenzamos el camino hacia palacio, dejamos atrás a aquella maravilla llena de vida y yo aún seguía enamorado de aquel lugar. Aquello era mágico, hermoso, nunca había visto nada parecido. Los monos danzaban de un lado para otro. Las dríadas nos saludaban desde los árboles y podía ver a las hadas jugar y realizando sus trabajos. Hubo algunas en especial que me encantaron, las hadas del agua, se encontraban en ella y jugaban a crear pompas y arcoíris. Se veía divertido, pero a la vez peligroso me decía a mí mismo y comencé a reír. El río era puro y transparente, en él se podían apreciar hermosos peces nadar río abajo. Las cascadas daban cierto frescor a la zona gracias a las gotas de agua que volaban en la brisa haciendo que éste ambiente fuera fresco y húmedo. Las flores de aquel lugar, nunca las había visto eran de formas y colores muy diferentes a las de nuestro mundo. Todo era especial y me sentía como en un cuento de mi infancia.

Ver completamente todo cubierto de un gran manto verde y casitas que nacían de la tierra en forma de pequeñas colinas. Sin lugar a duda, era como volver a mi infancia. También en el cielo se podían apreciar enormes aves que sobrevolaban los cielos, parecían guerreros aquellos seres que las montaban. Las aves eran criaturas enormes, cubiertas de plumas y otras muchas parecían tener escamas. Sus alas podían crear enormes sombras aquí abajo, y el movimiento ascendente y descendente de sus alas al volar creaba vientos huracanados. Llegamos a un camino de baldosas amarillas que nos llevaban al centro de la ciudad y sobre todo a donde nos interesaba ir, el palacio de OZ.

-Bueno Edgar.. ¿Qué te parece éste mundo?. Me preguntaba Dorothy.

-¿La verdad?, es maravilloso. Ahora empiezo a creer en todas vuestras historias. Respondí.

En el rostro se me notaba la sonrisa y el asombro que tenía por todo, era hermoso, jamás imaginé algo tan maravilloso.
-Éste mundo es un lugar lleno de vida, es donde comenzó la historia de la vida. Aquí, fue donde yo venía de pequeña cada vez que discutía en casa. Era una cría y solía escaparme a la granja de mis tíos maternos Em y Henrry, para no escuchar a mi padre. Muchas veces iba a Wonderland y solía tomar el té con Alicia y los demás. Pero un día crecí y dejé de venir, mi vida comenzó a cambiar y me enamoré. Pero bueno ya conocéis esa historia. Me decía tristemente.

La verdad es que ésto se lo cuentan a otra persona y no se lo creería nunca, ¿tomar el té cono Alicia en Wonderland? Y la toman por loca. No pude contenerme la sonrisa, pero duró poco ya que me puse melancólico al verla a ella.

-Tranquila, no recuerdes esas cosas que te hacen daño, recuerda que ahora estás con nosotros y nada te pasará. Respondí.

Me acerqué a ella, le abracé y besé su mejilla, sé que no era mucho lo que podía ofrecerle para calmarla pero a veces es mejor dar un gesto como éste para saber que no estás solo ante el dolor. Un abrazo puede cambiar muchas cosas según el momento.

El camino era muy largo y ella no dejaba de mirar de un lado para otro recordando su pasado por éstas tierras lejanas, yo casi podía sentir y ver a través de sus ojos. Me parecía ver al espantapájaros, y al hombre de hojalata incluso al león. Pero sabía que era imposible, eran sólo alucinaciones. Ella lloraba de emoción y a la vez entristecida evitaba cualquier palabra para que no me preocupara. Una vez dentro de la ciudad, continuamos nuestro camino, aquello parecía un mercado, había miles y miles de puestos. 

Todo cubierto en piedra color beige, en el centro de la plaza había una fuente de agua y en ella había una escultura de un hombre junto a una criatura llamada Aleonix. Aquella escultura simbolizaba la unión fraternal entre éstas dos razas. Entre la multitud de gente, había humanos y los Aleonix, eran unas criaturas mitad humanas mitad puma, andaban sobre dos piernas y vestían y actuaban como humanos. Ambas razas convivían en plena armonía, compramos algo para comer mientras tanto, y nos paramos en un puesto de sanación.

Parece de película, es increíble ver a éstas criaturas, son tan majestuosas y tan nobles.

-¿En qué puedo ayudarles? No preguntaba el tendero.

Un Aleonix anciano, vestía con una toga color granate y tenía los filos de la toga color verde. Tenía unos ojos azul cielo y su piel beige claro, su voz era un poco ronca debido ya a su avanzada edad.

-Hola, sólo mirábamos, es que me llamó mucho la atención la limonera de llaves. Decía Dorothy.

-Es una nueva planta medicinal, dicen que puede sanar cualquier enfermedad, pero las llaves no nacen siempre, hay que saber cuidar a la planta y necesita mucha paciencia. Yo me tiré bastante tiempo cuidándola, y mire, sólo me ha dado una llave, pero el cofre lo abre sólo un segundo y no da tiempo a coger el fruto que aguarda en él. Nos respondía el tendero.

Que planta tan interesante, nunca había visto nada parecido, que curiosa es. No podía dejar de mirarla, encima puede curar cualquier enfermedad, pero todo necesita un precio, debe de costar cara, y encima no sabes si puede darte la llave, es aleatorio. A saber..

-Es interesante la planta, deme una bolsa de semillas por favor. Nos vendrá bien para curar a Víctor y a Uriel cuando lleguemos, ¡Ah! y también para Emily y Dafne. Respondía Dorothy emocionada.

Pues ha tenido una brillante idea, pero a saber lo que nos cuesta la idea.

-Aquí tiene, la única semilla que me queda. Encima la única semilla que le queda, algo me dice que nos va a salir cara.. -Hay muy pocas plantas como ésta, porque muchas veces no sueltan su semilla. Debe de cuidarla mucho y estar muy pendiente como si fuera un recién nacido. De lo contrario morirá. Son 3 euros.

Joder, con la dichosa planta, va a ser jodida hasta conseguir una semillita. Pero me ha resultado bastante barata, pensé que iba a ser más cara.

-Gracias, señor. Respondí.

Continuamos el camino de baldosas dejando atrás a aquel mercado y llegamos a otro bosque, la ciudad cada vez quedaba más atrás, Dorothy decía que ya tenía que quedar poco, éste mundo había crecido muchísimo desde que ella se fue. Éste bosque por ejemplo, no estaba antes. La verdad es que era hermoso pero a la vez aterrador. No podía imaginar nunca que en Oz hubiera éste tipo de paisajes. Aquello parecía una ciudad en ruinas y desierta, las baldosas del suelo algunas estaban hundidas y otras sobresalían de él, el cielo estaba en plena obscuridad, y los árboles no tenían vida alguna, muchos de ellos sus hojas habían caído y los que aún parecían tener alguna, tenían un color pálido. 

Los cuervos sobrevolaban la zona y otros preferían postrarse en las ramas de aquellos árboles para poder observarnos mejor. Hubo algo que llamó nuestra atención, fue las luces de diferentes colores que colgaban de las ramas de algunos árboles. Decidí acercarme y pude ver que no eran bombillas si no hadas enjauladas en pequeñas celdas para hadas. Intenté abrirlas pero me era imposible, Dorothy me comentó que estaban hechizadas, quizá era obra de la malvada bruja del Este o del Oeste. Pero recordó que ambas murieron en su primer viaje, una voz proveniente de una de las jaulas gritaba auxilio. Y nos dirigimos a ella para ver qué quería decir.

-¿Dorothy eres tú?. Decía la pequeña hada.

Era una pequeña esfera de luz azul intenso la que hablaba dentro de aquella jaula.

-Sí,¿Quién eres tú? Respondía Dorothy.

-Soy Glinda la bruja del Sur, ahora tengo ésta forma de hada, la obscuridad ha empezado a dar sus frutos en éste mundo y está destruyendo todo cuanto roza. Ésto era el comienzo de una nueva ciudad que servía de canal de mercado junto con el mercado de allá abajo. La ciudad Esmeralda se encuentra en peligro, la obscuridad va hacia allí. Debéis marchar rápido, pero antes, por favor liberadme, os lo suplico.

-¡No es posible! ¿Cómo un ser tan poderoso como tú puede haber sido raptado por tal criatura?. Respondí confuso.

-Así es, pequeño humano, ahora todo mi poder ha quedado reducido y no puedo usar mi magia para salir de aquí. Debéis de pronunciar un hechizo, decid “Relaxo” y él hará explotar ésta jaula. Nos insistía la pequeña bruja.

Así fue, quise sentirme importante y poderoso por un momento y le dije a Dorothy que me dejara probar.

-¡Relaxo! Veo que no funciona Glinda. Le dije.

Me sentía ridículo, y no podía evitar reírme, pero a la vez preocupado por todo lo que dijo.

-Tranquilo, es normal, aún no tienes conocimientos, pero tranquilo, lo conseguirás, ten fe y piensa en algo verdadero. Y vuelve a decirlo.

¿Algo verdadero?, ¡Claro! El amor que sentía por Víctor, recordé todo lo vivido con él y eso me llenó de fuerza y vida. Volví a recitar aquella palabra y la jaula explotó. El hada salió de la jaula y volvió a recuperar su forma original incluyendo así sus poderes. Dentro de mí algo había palpitado como nunca antes lo había hecho, sentí algo extraño. Era una extraña sensación.

Mientras tanto en el hospital donde se encontraba Uriednery él comenzó a dar señal de vida pero aún mantenía su coma, por un momento abrió los ojos y como si respirara profundamente comenzó a faltarle el oxígeno, los doctores acudieron corriendo a la habitación y vieron el estado de Uriednery, la respiración se le iba cortando poco a poco, sus pulmones se obstruían e impedían que el aire pasara. Y en el hospital de Santa Catherine Uriel comenzó a toser y los médicos acudieron corriendo para ver qué era lo que ocurría. Se emocionaron al ver que podría ser un milagro que haría que Uriel despertara. Pero aún no parecía responder a las llamadas de los doctores. Aún seguían sumidos en un profundo sueño. Aunque la salud de Víctor comenzó a empeorar sin saber los motivos aún.

Emily y Mery, seguían investigando sobre las cosas que encontramos en el sótano, habían ido a la biblioteca y a los archivos del pueblo para ver todo lo relacionado con ese año. Pero no encontraban nada relacionado con el tema, algo se escapaba y no sabíamos qué era.

Dorothy, Glinda y yo por el contrario comenzamos a hablar sobre lo ocurrido. Glinda era hermosa, vestía de ropaje medieval y parecía una ninfa, no era para nada una horrible bruja de cuento.

-Debemos darnos prisa, tenemos que ir a escondernos al lago Esmeralda, allí tengo mi nueva casa y allí nos escondemos las criaturas mágicas.

Al marchar corriendo sentimos la presencia de alguien correr por aquella ciudad en ruinas, nos escondimos entre los árboles para observar quien era, y pudimos ver una sombra aparecer entre la nada y ante esa sombra un hombre montaba a un caballo obscuro. El hombre tenía una larga melena obscura y un cuervo en su hombro, él iba vestido con unas harapos de piel y pelo con armadura en las piernas, el caballo iba también con armadura y un cuerno simulando a los del unicornio. Los ojos del caballo eran color rojo sangre, eran tan intensos que parecía un manantial de sangre. Se les podía oír hablar, pero no se entendía qué decían. Decidí acercarme para poder oír mejor.

-¡Edgar vuelve aquí! Decía Dorothy asustada.

-Debo oír y ver quienes son. Dije.
Tengo que reconocer, que soy bastante cabezota, y sobre todo me gusta el riesgo.

-¡Déjalo pequeña, él es un alma curiosa como tú lo eras cuando eras más joven.

-Debes de llegar a ciudad Esmeralda, los humanos han sobrevivido a mi ataque. Pero creo que la mujer sabrá hacer lo que le ordené. Decía la sombra.

-Mi señor obscuro, voy a comenzar mi camino hacia Esmeralda y cuando llegue mataré a Oz para que no pueda comunicarse con ellos. Deben de pagar todo lo que están haciendo.

¿Qué mujer? No entiendo nada de lo que dicen, pero tenemos que darnos prisa, no puedo soportar la idea de que alguien más muera.

La sombra desapareció y el caballero comenzó su camino hacia Esmeralda. Volví con ellas y corrimos hacia el lago

Todo me parecía magnético, era hechizante, mágico, un verdadero Edén. Allí en el lago cruzamos un puente de piedra y me acerqué hacia la orilla para poder probar el agua. Me descalcé y sentí el frescor del lago entre mis pies.

Segundos después una enorme serpiente marina salió ante nosotros, me asusté y corrí hacia Dorothy. La serpiente nos hizo el gesto de que estaba de parte de nosotros.
-Bienvenidos seáis. Nos decía.

Era enorme, un tono verdoso y luces amarillas salían de su cuerpo.

-Hola Septus. Decía Glinda.

Tengo que reconocer que me acojoné un poco al principio pero ya ha pasado todo, parece que va a ayudarnos y eso me tranquiliza un poco la verdad. Pero tengo miedo, nunca he estado tan cerca de un reptil como éste.

-Debéis de ir corriendo a Esmeralda, Oz está en peligro. Nos decía Septus.

-¿Cómo podemos llegar antes? Respondí.

Es curioso, yo hablando con una serpiente, digo de contarlo en mi mundo y me dicen que estoy enfermo y me encierran en un manicomio.

-Debéis de ir corriendo por las baldosas amarillas ellas os llevarán al lugar. Pero tened cuidado. Nos decía.

Su voz era muy dulce y suave, a parte, parecía ancestral.

-Debéis de aprender antes varios hechizos para defenderos, pero sólo funcionarán en éste mundo. Una vez cumplida vuestra misión el poder desaparecerá.

Que interesante aportación la de Septus, ni que fuera a ponerme a usar la magia en mi mundo, me quemarían en la hoguera.

-Está bien, ¿Qué debemos hacer? Respondía Dorothy.
-Aprenderéis a luchar como guerreros para poder defender a Oz. Éstos son los hechizos, Vulnus Exo, os permitirá curar enfermedad. Relaxo puede relajar al oponente incluso explotarlo, Pluviento Maine, creará una gran tormenta, y por último Lupus Selenus el conjuro de la mutación, os permitirá ser licántropos por un tiempo.

Son muy interesante, pero.. ¿ésto qué tiene de poderoso?, no entiendo nada, ¿Para qué quiero yo todo eso?.

-Genial, se ven muy interesantes y muy necesarios. Respondía Dorothy.

¿Enserio?, Pero.. ¿ésta mujer qué se ha fumado? ¿Necesarios?

Nos pusimos a entrenar ante Septus y Glinda fue nuestra tutora.

Reconozco que al principio me era chistoso pero luego supe que era difícil conseguirlo y acabé picándome. Recordé que para que funcionara tenía que pensar en Víctor y así fue, pensé en él y en todo lo vivido con él y todo parecía más fácil.
Me acerqué a los árboles que no tenían vida y pronuncié Vulnos Exo y el árbol comenzó a florecer y cambiar el tono de su tronco. Me estoy quedando muerto, acabo de darle vida a éste árbol que estaba muerto. Vuelvo a intentarlo y éste también recupera su vida, así que miré a Dorothy y comenzamos a curar a todos los árboles y con el hechizo Relaxo comenzamos a liberar a todas las hadas. 

Conjuramos Pluviento Maine y el agua comenzó a manar del cielo ésta lluvia torrencial alimentó a las plantas que se estaban muriendo y por último el más difícil de los hechizos. Lo conjuramos y una enorme luna apareció en el cielo, las nubes se movían de un lado para otro mui aceleradamente, mi cuerpo me ardía y caí de rodillas ante todos. Sentí como la fiebre me subía y la sangre me hervía todo me quemaba por dentro, me miré las manos y el vello corporal comenzó a salir muy aceleradamente, los dedos de mis manos empezaron a alargarse y a engordar, mis manos ya no eran finas y alargadas ahora eran más largas y gruesas. 

Las uñas aumentaron su tamaño y el vello cubría toda mi mano y brazos, las piernas igual y mi rostro se empezó a desformar alargándose la zona de la mandíbula, mis ojos cambiaron de color, ahora eran un tono dorado, las pupilas las tenía dilatadas, y los colmillos aumentaron su tamaño. Los huesos de mi espalda comenzaron a romperse y formar un cuerpo animal, sentí como todo me destruía por dentro.

-AuuuH! Dije.

-Estáis listos para marchar. Dijo Septus.

No me parece muy bonito que yo esté echo todo un saco de pelos y aquí Dorothy tenga que estar viéndome desnudo con éste manojo de pelos colgándome como cortinas por todo el cuerpo. La miré ferozmente y ella no pudo aguantar la risa.

-Querida Dorothy tened mucho cuidado, debéis de tener la mirada bien activa, ahora tenéis la suerte de que Edgar es un buen perrito y tendrá el olfato muy desarrollado junto con sus sentidos. Marchar. Pero antes toma ésta ropa te hará falta más adelante.

Se acerca a Dorothy y le coge de las manos, Dorothy aprovecha y le da un abrazo mientras derramaba lágrimas de tristeza.

Nos pusimos de camino hacia Esmeralda, todo el cuerpo me pica, ahora entiendo qué siente un perro. Por eso se arrascan tanto, es tan molesto.

Una vez en Esmeralda, el hechizo dejó de funcionar y acabé desnudo, menos mal que Dorothy iba preparada con lo que Glinda le dio, ahora estoy vestido con una toga azul y filos dorados. Me siento ridículo con ésta ropa tan cortita se me puede ver todo como diga de correr aire.

Esmeralda es hermosa, toda color verde, el palacio es inmenso subimos las escaleras y allí estaban los guardias protegiendo la puerta. Dorothy habló con ellos para que nos dejaran pasar por orden de la bruja Glinda. Gracias a su pase pudimos subir a ver a Oz.

Era un hombre muy mayor y se encontraba muy debilitado recostado en la cama, no tenía poder para seguir adelante. Los monos voladores se veían a lo lejos sobrevolar los cielos en dirección a palacio.

¿No me jodas que tenemos que luchar contra monos? Y yo vestido con éstas pintas, ¿no pensará Dorothy que voy a volver a transformarme en chucho? Ni loco, jamás.

-Oz, ¿me recuerdas? Decía Dororhy preocupada.

Oz abrió los ojos y vio a Dorothy, acto seguido comenzó a llorar, me dio hasta pena verlo así, indefenso que no pude evitar ponerme a llorar yo también.

-Debéis de salvar a Esmeralda, yo ya no tengo fuerzas para luchar.

Me acerqué a él y miré a Dorothy, los dos nos leímos la mente y decidimos cogernos de las manos incluyendo la de él, cerramos los ojos y ambos comenzamos a pronunciar Vulnus Exo. Todo parecía normal y no cambiar, hasta que de pronto notamos como la fiebre comienza a bajarle y el tono de su piel a cambiar, Oz comenzó a recuperarse. No pude evitar saltar de alegría. Qué fácil es ésto de la magia, con un toque ya se soluciona todo. Me decía a mi subconsciente. Pero algo me dice que lo dije en voz alta.

-Edgar, debes de saber que todo poder requiere de un sacrificio, no abuses del poder y no digas eso, ya que puedes pagarlo muy caro. Nada es gratis en ésta vida, y que estés en otro mundo no significa que no puedas morir. Me decía Dorothy.

-Tengo miedo, lo siento no volveré a ponerme así. Respondí mientras agachaba la mirada.

Volví a mirar por la ventana y los monos voladores estaban más cerca, a demás no venían solos, una enorme nube de obscuridad volaba cerca de ellos, se acercaban cada vez más.

-Debemos de darnos prisa, la guerra está por comenzar. Dijo Oz.

-¡Pluviento Maine! Grité.

El agua comenzó a caer desde el cielo, y la tormenta eléctrica inundó todo el celeste azul, ahora todo era obscuro. Muchos monos cayeron al suelo quemados por los rayos, otros aumentaron su velocidad para llegar a palacio, de la nube obscura salieron criaturas obscuras y de entre ellas el señor del caballo que nos encontramos en el bosque.

Dorothy asustada y nerviosa por la situación conjuró nuevamente el Vulnus Exo, y la tormenta multiplicó su puder. Ahora los huracanes conquistaban el cielo y la tierra. Mis ojos dejaron de ser verdes a ser grises como el cielo. La ira corría por mis venas, grité mientras bajaba escaleras abajo, ¡RELAXO! Y las puertas de palacio se abrieron lanzando a todo lo que había por el camino por los aires.

Juro que me vengaré por el daño que estáis causando a mi mundo y a todos los mundos del universo. ¡Relaxo! Volví a gritar enfurecido, fruncí el ceño y cabreado corrí hacia ellos.
Dorothy corrió tras de mí y conjuró el Vulnus Selenus, mientras corría saltó al aire y en el aire se transformó en lobo, era una loba hermosa, color blanco y los ojos azules como el cielo. Jamás vi una criatura tan hermosa como ésta. Me miró y la miré, nuestras miradas se hicieron una, yo también me transformé, Oz desde la ventana conjuró otros hechizos para poder proteger la ciudad mientras nosotros luchábamos contra todas las critaturas. Licántropos, minotáuros, troll, ogros, orcos etc..

-¡Caray!, jamás sentí tanta adrenalina junta en mi cuerpo. Dije.

-Es algo que sólo se vive una vez. Me respondía.

Algo dentro de mí gritaba el nombre de Víctor. Tenía tanto guardado que éste sentimiento me hizo ser fuerte ante la lucha.

Ríos de sangre corrían por el suelo, los soldados de palacio junto con las criaturas mágicas del mundo unidas junto a nosotros en ésta lucha sin fin. Todos somos uno, podemos con ellos.

La nube volvió a abrirse y el caballero obscuro entró por ella.

-¡Volved!, ¡nos marchamos! Gritaba.

Muchos murieron en la pelea, pero otros heridos marcharon a la nube. Ya ha terminado todo, yo me quedé con ganas de más, se me hizo corta, pero sangrienta. La sangre me creaba la necesidad de beber y matar, no podía dejarme dominar por la criatura en la que estoy transformado, no podía dejar que éste licántropo dominara mi cuerpo. En ese momento volví a mi estado normal, y caí rendido ante el charco de sangre. Los soldados me recogieron y me llevaron a palacio.

A la mañana siguiente amanecí desnudo en una cama enorme, con sábanas de seda, la habitación era enorme y coloreada de tonos dorados y blancos, el sol se filtraba por la ventana, el suelo estaba hecho de mármol beige y en las paredes colgaban cuadros de Oz y las brujas. Que hermoso es todo ésto me decía a mí mismo.

Me levanté y caminé descalzo hasta la silla donde había ropa limpia, era una nueva toga, ésta vez era blanca con filos azules.
Tengo la sensación de que cada vez son más cortas las falditas éstas.
Dorothy entró por la puerta junto con Oz, venían sonriendo.

-Querido Edgar, admiro mucho tu valentía y por ésta razón te entrego ésta medalla, te la has ganado. Me decía Oz.

Una medalla de platino, con un puño grabado, es preciosa, simboliza el valor. Creo que no ha sido gracias a mí solo, yo creo que fue gracias a Víctor que lo tuve presente todo el rato.

-Gracias. Respondí mientras la miraba y sujetaba con las manos.

-Mi querida Dorothy, debéis marchar a tu mundo, mil gracias por volver a venir y sobretodo por salvar a Esmeralda de la obscuridad. Le decía mientras la agarraba de las manos.

No ha sido nada del otro mundo, pero si tuviera la oportunidad de volver a hacerlo no lo hacía. Prefiero venir mil veces a éste mundo que volver a ser un chucho.

Abrió un portal y ésta vez aparecieron dos portales, sorprendidos por lo ocurrido nos preguntamos a dónde nos llevaría éste nuevo portal. Quise averiguarlo y entré sin pensarlo, en él estaba el pegaso de Dafne, y se escuchaban gritos de desesperación. Su voz me era familiar.

Claro, ¿cómo no iba a sonarme esa voz? Era la loca de la reina, Dorothy entró por el portal y me dijo que volviera antes de que se cerrara, pero aproveché el momento para agarrar a Pegaso.

Volvimos a Esmeralda y nos despedimos de Oz, y ésta vez entramos por el portal correcto.

4 comentarios:

  1. Que bonitoooooo, como describes Oz! *O* me he metido totalmente en ese mundo y en el papel de Edgar!! lo he vivido vaya, me ha fascinado! me gusta el cambio que toma la novela, con criaturas, magia y preciosos paisajes, me mola mucho :D y decias que iba a ser mas real en que sentido? xD pero me da igual, a mi me encanta todo lo relacionado con estas cosas y me engancha =$ A Gea me la he imaginado totalmente preciosa, de hecho la iba a dibujar y todo jiji la descripción que le has dado es espectacular <3 sentí pena mientras leía cono se sentía ella y las heridas que le causaban al destruir sus mundos... pero que hermosura de lugar, ojalá existiera :p con esas hadas y bellas criaturas ains. Lo único que me ha dejaso mas intrigado es ese hombre montado a caballo, pertenece a ese mundo o es que va siguiendo a Edgar y Dorothy? eso es lo que me gustaría saber. Los poderes que les han confiado a Edgar y Dorothy me han flipado jaja y me ha hecho una gracia imaginar a Edgar convirtiendose en licantropo xDDDDD pero me guhta =$ un lindo perrito ^^ han aprendido rápido a usar esos poderes la verdad y la batalla en el castillo me ha recordado mucho a la del señor de los anillos xD aunque fueran solo ellos dos claro xD me ha dado repelús.. se puso bien feo pero salieron adelante con dos cojones y dos ovarios!!! En cuanto a Uriel y Victor pues... supongo que eso de que se mueban y tosan debe ser buena señal aunque dices que Victor empeora por momentos.. espero que encuentren rápido la cura por que si te soy sincero dudo que esa semilla que compró Dorothy sea tan milagrosa como para curarlos a todos, no se... ya se verá :p pero quero a Victor yaaa pronto ju. Y lo del pegaso? lo cogió para devolverselo a Dafne imagino, en fin salvaron Esmeralda y le dieron una medalla muy merecida a Edgar! ^^ por cierto.. esos vestidos que le han ido poniendo argg que sexy =$$$ jaja =$. Ahora espero que estos dos salgan con vida de esos mundos en los que se andan metiendo y encuentren lo que andan buscando ^^

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    1. haha te gusta eh e.e xD pero lo de real me refería después de éste capítulo. Sí lo he estado modificando dada dos por tres porque no me termina de convencer, i aún me gustaría cambiarle algo no sé, la batalla me parece simple es que no sé como hacerla más intensa, i sí me la imaginé tipo driada i quería darle una forma más humana, más viva hehe. Los poderes me gustó imaginarme a Edgar en su mutación hehehe i bueno la ropa i todo hehe respecto a Víctor pues eso está empeorando pero ia aparece en el próximo i nada el hombre del caballo es sólo un siervo de la obscuridad que ia está aquí. Es como un viajero de portales. I sí el pegaso lo llevan de vuelta a Dafne

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  2. ahhhhhhh!! me ha encantado!!!! dios es hermoso el pais de OZ, pude cerrar los ojos e imaginarlo con la descripción que hiciste de él, me ha fascinado. Y también me he quedado sorprendida con lo que pasó justo después de que Edgar hiciese el hechizo pensando en Victor, lo que les pasó tanto a victor como a uriel me ha dejado descolocada, que habrá sido eso? y bueno decir que Edgar me ha encantado, el valor que tuvo y demás me cae super bien ese personaje la verdad. Al fin encontraron al pegaso de Dafne, eso es una gran noticia, por fin se recuperará :D, me muero de ganas de leer el proximo capitulo jiji
    PD: ni se te ocurra cambiarle nada, te quedó genial

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    1. hehehe me alegro que te guste, es mejor que Maravilla hehehe i éste es el último mundo de fantasía que se verá en la novela al menos por ahora no tengo pensado poner más que mejor que cerrar esa parte con éste mundo i me encantó describirlo hihihi bueno ahora subo el siguiente i éste te va a encantar más aún hihihi

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