sábado, 30 de marzo de 2013

CAPÍTULO 19: EL CONTRATO.

-->

CAPÍTULO 19: EL CONTRATO.

Ha amanecido el sol ha comenzado a filtrarse por las cortinas en ésta solitaria y amplia habitación. Minutos más tarde llega una joven enfermera a traerme el desayuno.

-Buenos días señor Uriednery. ¿Cómo se encuentra hoy?

-Buenos días. ¿La verdad? Ni yo mismo lo sé. ¿Por qué me llamas Uriednery?

No entiendo nada unos me llaman Víctor, y ahora otros Uriednery.. No entiendo nada...

-Porque así es como pone encima de su cama.

Me giré y miré encima de la cama, en ella ponía una tarjetita con mi nombre, mi grupo sanguíneo y mis alergias.

Uriednery grupo sanguíneo A+ Alérgico a: Polen, Olivos, Ácaros del polvo...

-No entiendo por qué la gente de ayer me llamaba Víctor.. ¿Sabes algo a cambio?

-Señor no estoy al tanto de lo ocurrido, sólo me limito a repartir el desayuno.

Terminó de colocar el desayuno en la mesita y se marchó.

No entiendo nada, todo ésto me resulta tan extraño. Será mejor que me levante a ir al servicio, estar tumbado aquí me incomoda un poco. Intento levantarme pero.. ¿Qué pasa? ¿Por qué no responden mis piernas? ¿Qué es lo que está ocurriendo?

-¡Enfermera! Llamé desesperadamente pero no respondían.

Pasados unos minutos llegó una enfermera y me encontró tirado en el suelo. Pidió ayuda y me ayudaron a incorporarme en la cama.

-¿Qué me ocurre? ¿Por qué no siento las piernas? Decía llorando de la impotencia.

-Tranquilo, cálmate voy a llamar al doctor.

Pasados unos minutos el doctor acudió a la habitación.

-¿Qué le ocurre?

¿Qué me ocurre? ¿Que Qué me ocurre? ¿y tú eres médico?

-No siento las piernas.

-Cálmate, no intentes moverte. Vamos a llevarte a quirofano y vamos a mirarte a ver qué es lo que ocurre.

Me llevaron al quirófano y vieron que tenía los huesos de las piernas rotos y que tendrían que operar. Les escuché que la operación tendría que ser cuidadosa ya que tenía un estado delicado de salud y podría salir mal. Y quedarme paraplégico para siempre. Al escuchar aquellas palabras me dio un bajón de azúcar y me desmayé. Me llevaron a la habitación y pasados unos minutos una chica rubia con ojos azules y muy maquillada entró a la habitación. Yo abrí los ojos y al verla me sorprendí era la misma chica del día anterior. ¿Cómo se llamaba? No lo recuerdo. Hoy viene vestida con un traje parece una empresaria. Se ve que ha de manejar mucho dinero

-Buenos días Víctor. ¿Cómo te encuentras hoy?

-Buenos días. Me encuentro mal.

-Cari debes de recordar mi pequeño ángel.

-No recuerdo quien eres. Lo siento.

-¿Cómo es posible que no me recuerdes? Si yo soy tu...

La interrumpí porque no soportaba oírla hablar, tenía miedo.

-¿Soy tu qué?

-Eres mi marido Víctor, debes de hacer el esfuerzo para acordarte de mí. Me duele verte ahí, ¿qué dirán tus hijos cuando nazcan?

-¿Tu marido?, ¿mis hijos?, ¿estás embarazada?

No podía creérmelo, cuánta información tan de repente. Pero para estar embarazada no se le notaba.

-¿De cuántos meses estás?

-Estoy de bien poco, las pruebas me las hice el otro día y salieron positivas.

-Hay algo que no entiendo... ¿Por qué dicen que llevo años en coma? Y ahora me vienes tú y me dices que estás embarazada de mí. No recuerdo nada.

-No llevas tanto tiempo en coma. El otro día tuviste un accidente y sólo has perdido la memoria. Por cierto mi amor, he venido para que me firmes unos documentos. Quisiera que por favor firmaras éstos documentos ya que son urgentes y muy importantes.

-¿Unos documentos? ¿Sobre qué?

Uno despierta de un coma y tiene muchas responsabilidades, no entiendo nada. Prefiero estar acostado.

-Unos documentos para las escrituras de nuestra casa.

-¿Es que no está hecha la escritura?
Todo ésto me resulta raro, me tiene confundido. No recuerdo nada de lo que dice ésta chica.

-Mira por si no me crees te he traído algo que te ayudará a recordar.

Del bolso saca una copia de mi DNI y unos álbumes de fotos en los que salimos retratados ambos. Al ver la foto del DNI me doy cuenta que tiene razón en cuanto a que me llamo Víctor y al ver las fotos creo empezar a recordar algo. Es cierto que estoy casado con ella, aquí están presentes las fotos de la boda, pero no recuerdo el momento. Se nos ve una pareja muy unida, me da pena el no poder recordar nada.

-Mi vida, creo que estoy empezando a recordar.

No podía decir otra cosa, pero es que no recuerdo nada.. Pero si ella es feliz viéndome decir que sí lo recuerdo me conformo.

-¿Enserio? Me decía saltando de alegría. Se acercó a mis labios y me besó.

No siento nada con sus besos, ¿Es normal? ¿Quizá sea por el accidente? Todo ésto me tiene confundido no entiendo nada.

-Bueno amor mío debes de firmar el documento. Aquí abajo. Me decía señalándolo.

-Pero tendré que leerlo ¿no?

-¿No confías en mí amor? Me decía con la cabeza cabizbaja.

-Claro que confío, pero me gusta leer siempre lo que voy a firmar.

-No hace falta son muchas hojas y en todas pone lo típico.

-Bueno... confío en ti.

Cogí los documentos y los firmé, tras firmar los documentos me volvió a besar y se despidió. Tengo algo raro metido en el pecho. Pero no sé qué es exactamente.

-Bueno mi vida he de marcharme volveré a visitarte te amo.

Cierra la puerta y me vuelvo a quedar solo, no digo que no la crea pero es que hay algo que no me termina de convencer. Quizá me precipité en firmar los documentos. Se la veía muy interesada en mi firma. Bueno será mejor que no le de muchas vueltas a la cabeza, acabo de despertar de un coma profundo y lo que menos debo de hacer es pensar en todo.

¡Toc,Toc!

¿Quién podrá ser? No espero a nadie, los doctores no habían dicho nada de operarme por ahora.

-¿Quién es? Dije con tono bajo.

-Buenos días Víctor, ¿Se puede?. Era una voz masculina, y volvía a llamarme Víctor.
-Adelante, pasa.

El chico entró a la habitación iba vestido con una camisa a cuadros azules y blancos, unos pantalones vaqueros negros y el pelo desaliñado. Se ve que debe de ser un chico de aproximadamente 25 años.

-¿Cómo te encuentras hoy? Me preguntaba mientras se sentaba a mi lado.

-Cansado, disculpa que te pregunte.. pero.. ¿Quién eres?

Cuanto me gustaría saber quien es se le ve una noble persona.

-Víctor soy yo, Edgar tu mejor amigo, tu hermano, tu todo. Me duele que no me recuerdes, mira he traído algo que quizá te hará recordar cosas, te lo iré leyendo todos los días hasta que al fin lo recuerdes todo y puedas explicarme cosas como hacías antes del accidente.

Veo que tiene una mirada triste, perdida, solitaria, se ve que es cierto lo que dice, habla con mucho dolor y las lágrimas parece que le piden a gritos a sus ojos ser liberadas. Siento un extraño dolor en el pecho, es como que me impide respirar.

-¿Qué es lo que traes ahí?

Saca un libro parece un diario, es muy bonito y tiene la inicial de Víctor, no lo recuerdo tampoco.

-Es tu diario, lo encontré en tu habitación el otro día y quise leerlo estaba desesperado, tengo miedo hay cosas que bueno en fin.. no tienen mucha lógica pero tienen tu letra y supuse que también estarían escritas por ti.

Se le ve asustado, como si hubiera pasado algo, dice que ese diario es mío pero yo no lo recuerdo, la letra se ve que es igual en cada una de las páginas pero yo no recuerdo como es mi letra..

-¿Edgar verdad? No debes tener miedo, no recuerdo todo ésto pero quizá todo tiene un por qué, no debes darle vueltas, si eres quien dices que eres no tengo por qué reprocharte nada en cuanto al haber cogido mis cosas pero.. ¿Cómo lo has cogido? ¿Quién te ha dado la llave de mi casa?

¿Me habré dejado la puerta abierta? O.. ¿Habrá sido mi mujer la que le invitaría a pasar?

-¿Víctor? Vivo contigo, tranquilo verás como con el paso del tiempo lo recordarás todo. Debes de tener fe y ser paciente.

¿Vive conmigo? Ahora sí que no entiendo nada.

-¿Vives conmigo? No entiendo...

-¿Qué es lo que no entiendes?

Pues todo.. ¿Qué iba a ser sino?

-¿Es que no vivo con mi mujer?
-¿Mujer?

¿Por qué se sorprende? Es mi mejor amigo según dice.. debería de saberlo..

-Edgar.. será mejor que te vayas, estoy empezando a encontrarme mal y creo que voy a tomarme el desayuno y a dormir un poco.

-¿Pero Víctor?

-Por favor márchate...

Edgar se levantó y se marchó con la cabeza baja y con las lágrimas a punto de salir.

Preferí que se marchara no podía soportar la idea de crearme más confusiones, ha sido un día muy completo y eso que acaba de empezar..

-¿Qué le ocurre? ¿Por qué ha dicho mujer? Será mejor que me vaya a casa.. hay algo que no me termina de convencer..

-¡Ay! Mi querido Víctor que fácil me lo pusiste ahora ya no tendrás que temer me has firmado todos y cada uno de los documentos que tanto ansiaba. Menos mal que ésta mañana madrugué para poder hacer todo ésto. Ahora estás casado conmigo legalmente, me has dejado tu fortuna a mi poder, ahora ambos compartimos una gran fortuna, nunca imaginé que tuvieras tanto poder en tus manos. Pero sabré administrarlo, además de las reformas que haré en nuestra mansión me has firmado los documentos para crear una gran empresa y la constructora empezará hoy mismo con todas las obras. No puedo esperar más. Ahora sólo me falta lo más importante el bebé, le he dicho que me he quedado embarazada.. debo de conseguir un hijo mañana a la noche iré a por él será lo más placentero que jamás haya vivido. ¡Ay! Mery estás hecha toda una fiera. Será mejor que marche a la constructora para avisar.

-¡DOROTHY RELLISMARE! ¿Dónde está tu sobrina?

-¿Mi sobrina? Salió muy temprano. Ya te lo dije ésta mañana. ¿Qué te ocurre?

-¿Qué me ocurre? ¿Que qué me ocurre? Tu sobrina, no ha tenido mejor idea que decirle a Víctor que es SU mujer. Que están casados.. ¿Pero tu sobrina está loca?

-¿Cómo? Espera.. ¿Qué?

-¿Perdonad cómo? Decía Emily sorprendida.

-Lo que escucháis. Mery se ha vuelto loca.

-¿Que Mery se ha vuelto loca? Eso ya lo sabíamos todos Edgar. Decía Dafne mientras dejaba a la gata en el suelo.

-Dafne, no sabes lo último. Mery ha dejado a Víctor en el hospital con nada más y nada menos que.. ¡Casado!

-Hijo no has dicho nada coherente. Sería mejor haber dicho que lo ha atado.

-Me estoy perdiendo, ¿por favor alguien que me quite ésta cosa que me pierde?

-Querida que mi sobrina ha tenido la fatal idea de decirle a Víctor que están casados..

-¡Qué! Pero.. ¿Qué se fuma tu sobrina? ¿Cómo es posible?

-No lo sé, pero Víctor ésta mañana estaba muy confundido, ya acepta que lo llamemos Víctor. Pero está confundido, lo noto, su mirada perdida y a la vez atenta leía cada palabra que salía de mis labios Será mejor que Mery nos de una explicación buena de lo que está haciendo porque algo me dice que ésto no ha terminado aquí. Voy a ir a preparar la medicina de Uriel y aprovecharé para la de Víctor. Por favor Dafne y Emily acompañadme al dormitorio. ¡Ah! Dorothy he de darte algo, necesito que veas algo.

-Ahora mismo subo hijo, voy a ir un momento a sacar la basura.

Dorothy al abrir la puerta se encontró una enorme bola de hierro color negro que colgaba de una enorme grúa demoledora.

-¡AH! ¡SOCORRO! Gritaba mientras corría pasillo adentro.

-¡Alto! ¡Parad la máquina! Decía el jefe de obras. Pero ya era tarde la puerta cayó al suelo junto con gran parte de la pared.

-¿Qué ocurre? ¡Qué es éste ruído? Decía Edgar asustado.

-¿Se puede saber qué estáis haciendo? Decía Dorothy a los obreros.

-Disculpen, pero tenemos órdenes para demoler la casa. Vamos a empezar a edificar.

-¿Demoler la casa? ¿Con qué permiso? ¿Edificar? No entiendo nada, voy a llamar a la policía.

-Tenemos el permiso de la dueña de la mansión y si no les importa vamos a continuar.

-¿la dueña de la casa? Algo me dice que Mery tiene que ver en ésto. Por favor puede darme el permiso de obras.

Edgar insistía en ver el permiso de obras. Y éste se lo entregó. Acto seguido Edgar entró a la casa y junto con las demás comenzaron a sacar las cosas importantes y las llevaron al sótano esa parte no iba a ser tocada. Al abrir la puerta del sótano algo extraño se notó, era un calor un tanto fatuoso. Las obras se detuvieron durante unas cuantas horas, ya que tenían que guardar todos los muebles en el sótano. Tras finalizar la “mudanza” las obras retomaron su camino y todos en la puerta comenzaron a ver el numerito que Mery montó. Una vez demolida la mansión los obreros comenzaron a limpiar los destrozos y empezaron a edificar. Edgar junto con Dorothy estaban en la mesa de planos con el arquitecto y la verdad es que la mansión nueva y el proyecto maqueta que había era inmensa parecía una enorme ciudad reducida en una única casa. La verdad, el solar estaba muy pobre con la mansión que había, ahora está bien aprovechada. Tras pasar varias horas Mery se dignó a aparecer.

-Contigo quería yo hablar. ¿Se puede saber qué es todo ésto? No me lo puedo creer ¿y todas éstas bolsas qué son?
-Por favor Edgar no me mires así, te he comprado ropa nueva a ti y a las chicas, creo que va siendo hora de hacer cambios en nuestras vidas. He ido a ver a Víctor ésta mañana y le propuse un cambio radical. Bueno no lo propuse lo incité a hacer un cambio.

-¿Un cambio? ¿Un cambio Mery? ¿Tú estás bien de la cabeza? Estás completamente loca sobrina. Le gritaba Dorothy.

-Tía por favor no me regañes soy lo suficientemente mayor y madura para saber lo que hago con mi vida. Y creo que va siendo hora de que me formalice, así que.. ahora dejaré de ser la señorita Rellismare y pasaré a ser la señora de Lucksim.

-¿La señora de Lucksim? ¿Qué estás diciendo? Decía Dafne asustada.

-Lo que oyes abuela, ahora soy la esposa y futura madre del señor más rico de la ciudad Víctor Lucksim.

-No me lo puedo creer sobrina, tu obsesión ha podido contigo y has llegado muy lejos con ésto pero temo a que ésto vaya a más. Debes de parar ahora, necesitas un médico que te saque esa obsesión de adentro querida.

-No me regañes, al menos yo voy a sacar adelante todo lo que me he propuesto, ya va siendo hora. ¿No creen? Al menos deberíais de estar agradecida de que no os he mandado a la calle. Os dejé el sótano de mientras, disfrútenlo.

-No me lo puedo creer, jamás pensé que ésto pudiera llegar a éste extremo. Mery estás enferma.

-Déjala querida, no merece la pena discutir. Ya está todo hecho, veremos a ver cómo acaba todo ésto. Sólo espero que Víctor no acabe mal, porque si no...

-Tranquila Emily, él no sufrirá, él ahora es mío y yo soy de él. Seremos la familia feliz que tanto ha deseado.

-¿Querrás decir que tanto HAS deseado TÚ? Decía Edgar furioso.

-Bueno calmaos, las obras van avanzando en menos de una semana las obras habrán acabado, que por cierto, no son las únicas que han empezado. También han empezado a construir la mayor empresa de moda del mundo.

-¿Empresa de moda? Pero.. ¿Mery? ¿Qué estás haciendo? Decía Dafne.

-Tranquilidad, en menos de una semana todo habrá terminado y me agradeceréis todos éste gran cambio.

La noche a llegado y todos pasaron al sótano a cenar las obras continuaban su marcha, Mery había obligado a los obreros a trabajar día y noche sin parar. La noche había sido muy dura Edgar pasó la noche leyendo el diario y a la mañana siguiente..

-Buenos días Víctor.

-Hola ¿Quién eres tú? Respondí.

Parece que ahora todo el mundo quiere algo de mí.

-Soy yo Dafne, tu... no sé como podría definirme..

Yo tampoco, ¿mi abuela?

-¿Abuela?

Su cara cambió en cuanto dije aquella palabra, creo que me equivoqué, pero es que no puedo decir otra cosa.

-¿Mi madre?

Tampoco, algo se me escapa.

-No, Victor no soy ni tu madre ni tu abuela. Soy tu en fin.. No me creerías si te lo dijera.

La pobre está muy nerviosa, no entiendo por qué, pero la verdad se la ve triste. Es toda una abuelita encantadora viste ropas muy atrevidas para su edad, pero bueno. Cada cual tiene el dereco de vestir como quiera.

-¿Por qué no te creería? Desde que desperté nada tiene sentido, así que.. Adelante, no temas.

Que bueno soy animando la verdad es que como psicólogo me forraría. ¡Un momento! Si estoy forrado.. según mi mujer somos adinerados. Teniendo en cuenta la forma de vestir que tenía y que vivimos en una mansión... ¿Será mi asistenta?

-Ya lo sé, ¿eres mi asistenta?

Creo que he metido la pata, no debí decir eso, su cara ahora es furiosa.

-Víctor, escúchame lo que voy a decirte, soy tu novia, aparentemente puedo parecerte una vieja, una abuela o lo que tú quieras, pero soy joven y hermosa, ¿no me recuerdas? Hace años nos encontramos, yo huía de los guardias de palacio, soy una princesa. Y bueno estoy maldecida. ¿No recuerdas nuestros viajes para buscar la medicina para curar a Edgar? Y más tarde para curar a Uriel. ¿No lo recuerdas?

Ahora sí que me ha matado, ¿mi novia? Estoy siéndole infiel a Mery. Ésto no va bien Víctor debes de recordar todo cuanto antes. Pero es que no recuerdo nada por más que quiero.

-Debes de hacer un esfuerzo, no soy exactamente tu novia, porque no terminamos de formalizarnos. Al menos pienso que estábamos viviendo un algo juntos. En nuestros viajes vivimos grandes momentos.

Cada vez ando más perdido. ¿Qué clase de hombre soy?

-¿Si eras joven y hermosa cómo es posible que ahora seas anciana?

¿Qué ridícula la pregunta no?

-Víctor querido, estoy maldecida. Hay cosas de mí que no sabías pero cuando pensé que era el momento de que las supieras fue demasiado tarde y pensé que habías muerto.

-Es que por más que quiero recordar no lo recuerdo. Todos me decías cosas incoerentes, nada tiene sentido. Entiéndeme. Sólo pido tiempo y espacio para poder ordenar mi cabeza, acabo de despertar y me estáis agobiando con tanto tema.

-Mery está haciendo salvajadas y locuras con tu casa, ha cambiado la vida de todos. Está completamente loca.

-¡Un respeto a mi mujer! No la puedes despreciar de esas formas.

Se levantó de la silla y me gritó.

-¡No es tu mujer! ¡Es una cría mal criada e inmadura! Está cegada por la obsesión que te tiene, tú nunca la viste como mujer. Tú me deseabas, matabas por éste cuerpo.

La verdad es que tiene razón no siento nada por Mery, pero..¿Yo mataba por ese cuerpo que está consumido? Creo que ya lo recuerdo todo.. fue una noche loca de borrachera y acabé en un burdel.. pero no diré nada vayamos a que me suelte una bofetada..

-Lo siento, pero no sé qué decir. La verdad es que estoy muy confundido, debes de darme tiempo y espacio. Sólo te pido que por favor no estreséis a mi mujer, está embarazada y no quiero que pierda al bebé.

-¿Está embarazada? Es lo último que me faltaba por escuchar ésta mañana. ¡Mira Víctor, no sé qué te habrá contado esa zorra! ¡Pero te voy a decir una cosa, esa a la cual llamas “mi mujer” nos ha echado de la casa, nos ha mandado al sótano a vivir, está construyendo una nueva mansión, está derrochando TU dinero y te está manipulando a su antojo! No sé hasta cuándo vas a seguir con éste tipo de problema mental que tienes pero ojalá la poción de Edgar haga efecto porque si no... no sé que será de nosotros. Sólo pediré por ti y por tu bien. Me marcho Víctor que tengas un buen día.

Cerró de un portazo, la verdad es que sus palabras rompieron los muros de mi sensibilidad pero cada vez estoy más confundido.. No sé qué pensar, ni qué hacer.

-Hola Víctor ¿Cómo estás hoy? Decía la doctora Alani

-Buenos días, ¿la verdad? Agotado.

-Debes de reposar la operación será mañana y tiene y debe de salir todo bien. No temas, por favor debes de firmar éste documento.

¿Otro documento?

-De acuerdo, ¿Me dejarás leerlo?

-Claro Víctor, pero pone lo típico que pone en los documentos antes de una operación.

Me transmite más confianza que mi mujer, no lo leeré. Confío en ella. Lo firmo y se lo entrego.

-Aquí tienes. Por cierto.. ¿Cuánto tiempo he estado en coma?

-¿A qué viene ésta pregunta?

-Necesito respuestas no más, son muchas las cosas las que me cuentan y necesito saber cosas para ir recordando.

-Llevas casi 6 años en coma, te encontramos muy malherido en la playa. Pensamos que te morías. Pero por lo menos lo malo ha pasado y ya has vuelto en sí.

¿6 años? Mi mujer me dijo unos días no más... No entiendo nada..

-Está bien.. Gracias...

-Si necesitas algo, pulsa el botón que tienes junto a la cama. No dudaré ni un segundo en venir. Que tengas un buen día hijo.

Hijo.. me habla con una dulzura, la doctora De Riva se la ve tan tierna y dulce. Es hermosa, pero no debo pensar en más mujeres. Bastantes mujeres he tenido por hoy.

Mientras tanto en el hospital de Uriel..

-Doctor, ¿Cuánto me queda para el alta?

-Aún te queda bastante, estamos haciendo pruebas para ver qué fue lo que hizo que volvieras en sí y el que cayeras en coma. No entendemos nada.

-Está bien.. Respondía Uriel con la cabeza agachada.

-Buenos días Uriel soy Edgar he venido para darte algo que te ayudará a recuperarte.

-¿Qué le vas a dar? Decía el doctor.

-Nada del otro mundo, es manzanilla. La preparó ésta mañana la abuelita y dije le llevaré un poco a Uriel para que la pruebe. Decía nervioso.

-Está bien, pero debe de saber que no está permitido ingerir cosas que vengan de fuera. Haré la vista gorda, sólo porque huele muy bien. Pero por favor no traiga más cosas.

-De acuerdo doctor, ¡Gracias!

-Gracias por venir y traerme ésto. La verdad es que pensé que no se iría nunca ese doctor. ¿Eres Edgar verdad? ¿Es manzanilla?

-No, es una poción que te sanará.

-¿Una poción? Suena a brujería..

-Sí. Decía mientras sonreía.

-Huele muy bien. Será mejor que me la tome rápido. No quiero que se enfríe.

Uriel al tomarse el brebaje empezó a sentir algo extraño en su cuerpo su malestar comenzó a desaparecer pero sus piernas seguían sin funcionar. El color rojizo de sus ojos comenzó a emblanquecer y su piel pálida comenzó a tomar color.

-Gracias Edgar, me encuentro mucho mejor. Creo que ha sido lo mejor que me han podido dar. Ahora tengo la esperanza de que pronto me darán de alta.

Mientras tanto en la mansión.

La mansión continúa su rumbo Mery les insiste a los obreros a trabajar más rápido y contrata más hombres para las obras.

-Si todo sale como tengo planeado Víctor sólo será mío. Será mejor que vaya a comprarme algo de lencería para ésta noche.

-Querida, creo que tu sobrina ha perdido el norte. No parece la misma, ha sido enterarse de que Víctor está vivo y ha comenzado a cambiar. Pero a peor. Que Víctor no recuerde nada ha sido un punto a su favor, habría que hacer algo para cambiar el rumbo de todo ésto o al final nos salpicará a nosotras.

-Tienes razón Emily pero no podemos hacer nada, mira dónde estamos metidas. En la boca del lobo. Ahora aquí en el sótano. Menos mal que la puerta esa está cerrada y sellada. Que si no... No quiero imaginar lo que sería de nosotras. Aunque noto la presencia de algo maligno tras la puerta. No me gusta nada. Y Dafne ésta mañana marchó a hablar con Víctor espero que lo haya hecho entrar en razón. Y Edgar fue a visitar a Uriel.. ¿Cómo le habrá ido?

-Espero que bien. Respondía Emily mientras recogía los platos de la mesa.

viernes, 29 de marzo de 2013

CAPÍTULO 18: El Diario.

-->

CAPÍTULO 18: El Diario.

Víctor acaba de abrir los ojos y nos hemos reído de lo que ha dicho pensando que había sido una de sus atrevidas bromas. Pero.. ésto último me ha dado que pensar. “¿Quiénes son ustedes?”

Un gélido escalofrío ha recorrido todo mi cuerpo, es mucha la presión que siento. Me acerco a él y le cojo de la mano.

-Víctor, ¿No sabes quienes somos?

Acto seguido me quitó la mano y me retiró la mirada asustado. Comenzó a mirar a todos lados y a gritar.

-¡Socorro! ¡Ayuda! ¡Que alguien me ayude! ¿Quiénes son éstas personas? ¿Dónde estoy? ¡Socorro!

Todos los presentes no sabíamos como reaccionar ante la situación el mundo se me estaba cayendo encima con el paso de los segundos. Alani nos sacó de la habitación y el doctor acudió enseguida para ponerle un calmante. Él cayó en un profundo sueño y se lo llevaron para hacerle pruebas.

-¿Qué le ocurre doctor? ¿Por qué ha actuado así? Le preguntaba acelerada Dorothy al doctor.

-Vamos a hacerle pruebas, tened en cuenta que acaba de despertar tras llevar varios años en coma. Alani por favor acompaña a los familiares a la habitación y dales una tila.

-De acuerdo. Por favor pasen ahora mismo estoy con vosotros.

Pasamos de nuevo a la habitación y no podía dejar de escuchar en mis oídos las frías palabras de: “¿Quiénes son ustedes?”

-¡Ha sido por tu culpa Edgar! Tú has hecho que esté así. Me gritaba Mery despechada.

-¿Mi culpa? Perdona pero tú le has besado con una intensidad que casi lo descuartizas ahí mismo. Además todos nos hemos acercado a él.. ¿Por qué tendría que ser sólo mi culpa?

-Por favor chicos dejen de discutir. No merece la pena y más ahora. Sólo necesitamos calmarnos y esperar los resultados. Tenemos que alegrarnos de que al menos siga con vida. ¿No creen? Decía Dorothy para calmarnos.

-Estoy de acuerdo con Dorothy, quizá sólo sea pasajero. Decía Dafne.

Emily no dejaba de mirar por la ventana se encontraba inquieta, nerviosa y pensativa.

-¿Qué te pasa Emily? Le dije acercándome a ella.

-Nada, sólo tengo miedo.
En ese momento el teléfono sonó, era el de Dorothy y ella nerviosa lo cogió.

-¿Sí quién es?

-Hola ¿Dorothy?

-Sí, soy yo.

-Le llamamos de la clínica donde se encuentra Uriel tenemos que darle una noticia. Ha sido un milagro, el joven a abierto los ojos.

-¡Uriel ha despertado! ¿Cómo se encuentra? Gritaba emocionada.

-Ha sido un milagro, hemos ido a revisarlo como todos los días para ver como estaba o si daba alguna señal y de pronto abrió los ojos, pero...

La llamada se cortó.

-¿Pero..? ¿Hola, hay alguien?

-¿Qué ocurre? Le dijimos todos al unísono.

-¡Uriel ha despertado!

-¡Otro milagro más! Dijo Mery con cara y tono de ironía.

Ésta chica cada día me sorprende más, nunca la voy a entender. Primero desea que se recupere y ahora actúa así. Y con Víctor... ¿Qué decir? Me ha dejado muy sorprendido la actuación de hoy.

-Será mejor que nos marchemos a casa, pero antes daremos los datos para que estemos en contacto y nos avisen.

-Chicos disculpad mi tardanza, acabo de terminar por hoy mi jornada, hoy es mi día libre. Si os parece bien nos podemos ir a tomar algo.

-Tranquila, Alani nos íbamos ya pero si quieres puedes venirte a casa y hablamos más tranquilamente. Dijo Emily.

Mientras que ellas iban al coche yo marché a recepción a dejar los datos para que nos mantuvieran informados de los avances. Cuando salí del hospital noté una extraña sensación aún tenía el olfato licantropiano y olía algo malo.

-Chicas vamos a ir primero a visitar a Uriel, que creo que al pobre también tenemos derecho a visitarlo ya que es uno más de la familia al fin y al cabo. Dije.

-Ya salió la Santa Teresa de Calcuta.. Por favor.. Pero si no te cae bien, deja de actuar como un falso y quítate esa máscara... Aún no se me va de la cabeza esa sucia escena en la que tú y tu nueva amiga os habéis tomado ¡LA LIBERTAD! De besar a MI Víctor. Decía con tono resentido.

-Por favor chicos dejad de comportaros así, parecéis críos a pesar de la edad que tenéis. Decía Dorothy intentando calmar la situación.

La verdad es que yo ya sabía que ésto iba a dar mucho que hablar, pero nunca pensé que Mery fuera a estar así de buscona. Podía verla por el espejo como cogía su barra de labios rojo intenso y se los volvía a repasar, acto seguido cogía su rimmel de L'oréal efecto pestañas extra largas, se ajustaba el corsé para y en voz baja no dejaba de balbucear cosas sin sentido.

Ya hemos llegado al hospital nos bajamos y subimos a la habitación donde se encontraba él.

-Hola Uriel, ¿Cómo estás hoy? Quizá no me conozcas soy Edgar.

Me siento ridículo, la verdad es que no sé por qué lo hago.

-¿Quién eres? ¿Vosotros quiénes sois?

Lo que me faltaba otro que no sabe quien es quien. Pero hay algo que me escama mucho más aún.

-No es posible, ¡SANTO CIELOS! ¡Es idéntico a Víctor! Exclamaba Alani.

Si ya lo decía yo.. que éstos dos son muy similares.. pero bonita tú no te quedas atrás... a ti también se te parece...

-Cierto es como él. Pero en algunos rasgos... Le dije.

-Tesoro.. ¿Cómo te encuentras? Nos dejaste muy preocupados a todos. Le decía Dorothy.

-Hola pequeño soy Emily quizá no me conozcas pero he oído hablar mucho de ti pequeño.

-No sé de quién me habláis, no os conozco de nada. ¿Dónde estoy? ¿Por qué tengo todo este aparatejo enganchado a mí? Decía asustado.

No tiene sentido, ¿Qué diantres está ocurriendo?

-Por favor Uriel, tranquilízate, somos amigos y hemos estado preocupados por ti.

-¿Madre? ¿eres tú?. Decía Uriel mirando detenidamente a Alani.

¿Madre? Se piensa que es su madre, no me lo puedo creer.

-No, hijo, lo siento, te has equivocado no soy tu madre. Respondía.

-Dejadme a mí.. Decía Mery apartándonos de la cama.

-Hola Uriel, cuánto tiempo sin vernos, ¿a mí sí me reconoces verdad? Soy Mery tu mejor amiga. Tu fiel amiga. Le decía mientras le cogía sus manos y las entrelazaba con las suyas.

-Lo siento, pero no sé quien eres. Respondía.
-Bueno Uriel, tranquilo no pasa nada. Has estado mucho tiempo en coma y es normal que te encuentres así. Debes reposar y descansar, aunque has descansado mucho en éstos últimos casi 6 años. Habéis vivido muchas cosas y poco a poco verás que vas a ir recuperando la memoria te lo prometo. Le decía para calmarlo.

-Gracias, eres muy amable conmigo. Pero tengo miedo, antes había aquí una mujer mayor cuando abrí los ojos. Me miraba con una mirada penetrante y me dio miedo. Juraría haberla visto en otra parte pero no recuerdo donde.

¿Una mujer mayor? ¿mirada penetrante? No entiendo nada.

-¿Cómo era esa mujer Uriel? Le preguntaba Emily.

-Chicos creo que sé a quien se refiere volvía a decir.

-¿Estás segura querida? Respondía Dorothy. Mira que no estamos para tonterías ahora.

La puerta se abre y entra el doctor con las pruebas.

-Buenas, me alegra veros aquí a todos reunidos. Iba ahora mismo a llamaros de nuevo, al parecer ésta mañana ha habido problemas con la línea y se cortó. Lo que quería deciros es que el joven tiene graves problemas. No recuerda nada de lo ocurrido y puede que no sea capaz de volver a andar.

-¿No volveré a andar doctor? Preguntaba impotente.

No es posible, ¿Por qué el destino es tan cruel con la gente?. Me duele ver que el doctor ha sido tan frío de decirlo ante él.

-¿Qué está diciendo doctor? Le preguntaba Alani interesada en el tema. Soy doctora trabajo en el hospital de la ciudad vecina y estoy aquí de visita con éstas personas. Me gustaría si no le importa llevármelo a aquel hospital y poder hacerle pruebas. Si a ustedes no les importa. Insistía.

-Me alegro de su brillante comentario pero Uriel no saldrá del hospital sin el consentimiento de su tutor.

-Doctor su tutor no se encuentra capacitado para poder dar permiso al señor Uriel. Le reprochaba Dorothy.

-Lo siento, sin su consentimiento no podremos hacer nada. Decía mientras se iba.

-¿Qué está ocurriendo? ¿Por qué no puedo marcharme? Preguntaba Uriel.

-Tranquilo, verás que podrás salir, no temas. Le decía.

-Será mejor que descanses Uriel. Verás que pronto te recuperas y vuelves a casa. Nosotros nos marchamos ya. Recupérate pronto. Le decía Mery.

Salimos de la habitación y tenía una extraña sensación, sentía como si alguien hubiera estado todo el rato observándonos pero ¿Qué? Salimos del hospital y nos subimos en el coche. Marchamos a casa y una vez allí preparamos la comida.
Yo me encargué de preparar la ensalada, Mery de colocar el mantel y los cubiertos, Dafne de preparar la carne con salsa a la pimienta. Dorothy junto con Emily la tarta para el postre y Alani se encargaba de las bebidas y el cocktail.
Nos sentamos en la mesa y comenzó el interrogatorio y preguntas sin respuestas.

-Bueno Alani.. llevas mucho tiempo trabajando en el hospital. ¿Cómo que no te dio por buscar a los familiares de Víctor? Le preguntaba Mery.

-Lo hicimos, pero no sabíamos por donde buscar. Nadie lo vino a buscar.

¿Cómo que nadie lo fue a buscar? ¡Yo sí fui!

-Yo si fui pero me dijeron que no estaba internado en él.

-No lo recuerdo, pero él estaba con el nombre de Uriednery.

-¿Por qué le pusisteis ese nombre? Le preguntaba Emily.

-¿La verdad? No lo sé, él solía hablar en sueños. Y no se le entendía.

-¿Cómo se encontraba cuando lo internaron? Le preguntó Dorothy.

-Recuerdo que estaba tirado en la playa, en la orilla del mar. Lo llevamos al hospital y comenzamos a hacerle las pruebas necesarias. Pero daba resultados negativos. Hubo noches en las que le daban convulsiones. Y más de una noche nos dio el susto pensábamos que lo perdíamos. La verdad es que ha sido un caso muy difícil de tratar, presentaba síntomas de todo tipo de enfermedades incluso pensamos que podría ser un muerto en vida.

¿Muerto en vida? ¡Anda! ¡Cómo Uriel!

-¿Qué más? Insistí.

-Poco más puedo agregar, sólo eso. ¡Ah! Tengo que daros algo. ÉL tenía ésto colgando de su cuello. ¿Sabéis qué significa?

Nos hizo entrega de la piedra que portaba Víctor. La Hidrópetra. Cuando la cogí comenzó a brillar junto con las demás. Y señalaron una luz en dirección al patio. Me levanté y salí corriendo a ver a las plantas. Éstas ya estaban maduras, eran enormes, las llaves abrían los baúles y en ellos se encontraba el frasco que tanto asiábamos.

-¡Rápido, venid! Grité.

-¡Ya han nacido! ¡Han dado su fruto! Gritaba de emoción Dorothy.

Recogimos varios frascos y la planta desapareció dejando caer la semilla. Algunas no la dejaban, y sólo quedaba el tallo seco. Volvimos a la mesa y continuamos nuestra charla.

-Bueno Alani, cuéntanos algo sobre ti y tu vida. La verdad tengo que decir que tienes mucho parecido con él. Le decía intentando hacerla hablar.

-¿Mi vida? No soy nadie del otro mundo.

¿Nadie del otro mundo? Que simpática la chica.

-Soy una mujer de lo más normal, tengo 40 años...

¿40 años? Que bien se conserva la señora. Le echaba menos.

-¿40 años? Que bien te conservas hija Le decía Emily. ¿Qué cosméticos usas? Decía mientras reía.

-Gracias, pero sí, tengo que agradecer que me conservo bien a día de hoy. Y bueno yo vine hace casi 6 años y me tocó el caso de éste chico Víctor. Fue mi primer trabajo en la ciudad vecina. Cuando lo vi por primera vez noté una sensación extraña, casi similar a la que sentí cuando vi la casa. No sé. Puede que esté volviéndome loca o sea cosa de magia, pero todo me escama un poco.

¿Cosa de magia? Hahahaha, no puedo evitar reírme pero tiene gracia. La verdad es que no tiene mucho sentido, aunque tiene mucho a la vez. Justamente aparece en el momento correcto.

-Lo que tengo claro es que desde que lo traté, tenía la necesidad de hallar la respuesta. He estado trabajando muy duro en ésto y no puedo dejarlo ahora. Quiero saber más acerca de lo que le ocurre al joven Víctor.

-Bueno yo me retiro. Decía Mery levantándose de la mesa.

-Yo también me retiro voy a descansar un poco decía Emily.

¿Dónde van tan pronto? Suspiré y continué escuchando a Alani.

-Entonces tienes una fijación por Víctor cierto ¿no? Preguntaba Dafne.

-Tanto como fijación no, pero sí afecto por él. Se le ve un chico muy joven y bueno no puedo soportar la idea de que le pasara algo. Es como el sentimiento de una madre al ver a su hijo.

Como una madre al ver a su hijo”... Interesante aportación...

-¿Tienes hijos Alani? ¿Estás casada? Preguntó Dorothy.

-¿hijos? No, no puedo tener hijos. Soy estéril. Mi expareja me dejó por ser estéril. Me despreció como una planta seca. Decía mientras se le derramaban lágrimas.

Que triste, ver como puede ver hombres así. Dan ganas de partirle la cara a los insensibles esos.

-No temas, sé lo que es eso. Yo también lo soy pero no por ello me hundo ahora. Debes de ser fuerte querida. Le intentaba animar Dorothy.

-Que triste ver como aún hay personas así de tan negativo corazón.

-Ahora estoy saliendo con otro chico y bueno la verdad no me va mal. Leroy Stan es de lo mejor que he podido conocer.

Leroy que bonito nombre.

-¿Cómo es él? Preguntó Dafne.

-¿Él? Es un hombre atento, cariñoso, sensible, todo lo contrario al anterior.

Bueno al menos le va bien ahora. Es lo que importa. Será mejor que me vaya al dormitorio, necesito continuar investigando más acerca de lo ocurrido con Victor.

-Bueno me voy a retirar. Si os importa luego bajo.

-Ok. Descansa. Decía Alani.

-De acuerdo pequeño. Decían al unísono Dorothy y Dafne.

Al subir las escaleras noté un escalofrío y se escuchaba hablar a alguien en el dormitorio de Mery. No era la voz de Emily. ¿Con quién hablaría entonces?

-Debes de darte prisa, todo está marchando muy bien ahora.

-Márchate ya, no es el momento aún.

Abrí la puerta y entré a la habitación.

-¿Con quién hablabas? Decía.

-No te han enseñado a tocar a la puerta maleducado. Me decía mientras me echaba de la habitación y cerrándome en las narices.

¡Que mujer más imbécil! ¡No la soporto!

Entré en mi habitación. Me quité la camiseta y los calcetines y volví a sacar el diario.
Será mejor que me ponga cómodo me meteré en la cama y encenderé la luz de la mesita de noche. Voy a cerrar antes la persiana y el pestillo de la puerta para que nadie me moleste.

1 de Mayo de 2025.

Hoy ha venido aquel chico a visitarme, no puedo recordar quien es. Pero insiste en que me conoce. Me llama Víctor, y no recuerdo a nadie con ese nombre. Todo ésto me escama y me da miedo. ¿Por qué todos insisten en que me conocen? ¿Qué está pasando? ¿Quién será ese tal Víctor? A parte, una chica rubia con pintas de empresaria y de entender del tema financiero no deja de pedirme que firme unos documentos. No entiendo por qué insiste tanto. La verdad tiene pinta de tener mucho pero que mucho dinero. Y las formas de hablar es sin duda de una chica con mucho dinero. Me ofreció montar una empresa pero no sé si estoy preparado para ello....

No entiendo nada. ¿Qué querrá decir todo ésto? Voy a leer algo más a ver si más adelante se sabe algo.
5 de Julio de 2025

Hoy es el día más importante de mi vida, hoy me caso con la mujer que amo. Tengo que decir que a día de hoy soy el hombre más feliz del mundo. Desde que apareció en mi vida todo a cambiado. Pero tengo miedo, no sé qué pueda ocurrir. Hay gente que no quiere que me case. Han intentado manipular todo para evitar que éste día ocurra.

¡SE CASA! ¿Quién es la mujer con la que se casa? ¡¿Por qué no lo pone?! Comencé a pasar páginas para atrás para ver si podía encontrar el nombre.

14 de Junio de 2022

El mar ha conquistado el celeste azul, la luna destaca ante tal paraíso azul no puedo dejar de pensar en todo lo vivido. Tengo miedo de salir, tengo miedo de que me vean llorar de nuevo. No puedo ocultarlo más, pero tengo una presión que me oprime el pecho. Siento un vacío en mi interior. Desde que se marchó todo ha dejado de tener sentido, aquel accidente de tráfico se lo llevó....

Ésto tampoco me interesa.... ¿A quién se llevó? Éste chico no tiene la manía de poner nombres.

Vamos a ir más atrás debe de haber algo que me de la pista de lo que busco.

5 de Noviembre de 2020

Edgar entró en mi cuarto de baño mientras yo disponía a bañarme, tenía miedo, me encontraba malherido. No podía soportar la idea de que mis pesadillas me quisieran destruir de nuevo. Esa noche él y yo nos bañamos juntos y vivimos una experiencia que nos unió como nunca antes nos había unido nada. Esa noche entrelazamos los lazos de una gran e infinita amistad. Tras bañarnos, Mery estaba en su dormitorio hablando sola y él y yo aprovechamos para salir un rato en la noche. Hemos estado en el lago de Cristal, estaba completamente nevado, el frío petrificaba todo cuanto tocaba, pero él y yo hemos estado completamente desnudos. Nos hemos bañado en sus aguas, hemos sentido el gélido frescor de sus aguas penetrar por nuestro cuerpo. Al salir no teníamos toalla para secarnos. Edgar quiso ofrecerme una rosa Azul, que sin saber cómo habían aparecido bajo esa hermosa noche de luna llena color azul. Él se pinchó con las espinas y la rosa cayó al suelo. Yo fui a ver qué ocurría y un charco de sangre manaba de entre sus manos. Al coger la rosa azul del suelo ésta también se me clavó y acto seguido caí rendido al suelo...

No es posible.. ¿Cómo diantres ha podido ocurrir ésto? ¡NO LO RECUERDO!
No puedo creer que todo ésto ocurriera en aquella noche. Pero.. ¿si amanecimos desnudos en su cama? No entiendo nada.. Será mejor que siga leyendo más para atrás.

6 de Febrero 1596

¿1596? ¿Cómo es posible que en éste diario esté escrito ésto?

Mamá ha muerto, no puedo echarle la culpa de lo ocurrido. Pero se lo tenía merecido, Padre hizo lo correcto, enterrarla viva, ella merecia morir por renegar de mí su querido hijo...

Ésto... No tiene mucho sentido... ¿Quién ha podido escribir todo ésto tan macabro? ¿Enterrar viva? ¿Mamá? Seguiré leyendo.

Madre ha tenido a dos hermosos bebés pero a uno de ellos lo ha tirado al cubo de la basura. Madre no me ha querido nunca. Por eso merece estar enterrada viva, nadie sabrá nunca que padre la mató. Mi querido hijo y hermano ¿Dónde estará? Debo encontrarte, tú has sido siempre el favorito. Debo de salvarte, quieren matarte.

Ésto no tiene mucho sentido.. ¿Quién ha podido escribir todo ésto? ¿A quién pertenece éste diario? No entiendo nada.

De pronto siento un escalofrío recorrer mi cuerpo. Hace frío y no me atrae buena vibra todo lo que está pasando. Éste diario oculta cosas que no sé si deberían de salir a la luz. ¿Qué ocurrirá en la última página? No creo que haya nada escrito pero.. por mirar...

19 de Septiembre 2035

Hugo hoy ha faltado a clase, no puedo creer que éste chico sea todo un desastre. ¡No sé a quién se a parecido! Odette mi preciosa princesa ha aprendido a usar su don, y me ha confesado que ha visto a una mujer mayor caminar por la casa. Ésta mujer mayor lleva años muerta. Tengo miedo de que Minerva haya vuelto a las andadas..

¿Quiénes son éstos? Víctor.. espero que algún día recuerdes todo porque no entiendo nada.. ésto pasa por meter las narices donde no me llaman ahora sé demasiado y no debería de saber tanto.. ¿Qué pasará en la mitad del diario?

21 de Diciembre 2012

Querido diario hace tiempo que no escribo, tengo miedo, hoy he salido a comprar al supermercado y ha habido un terremoto muy grande. El epicentro fue en el centro comercial y se ha abierto una grieta. En todos los canales han mencionado que debemos evacuar la zona, un grave acontecimiento se aproxima.

¿Qué es ésto? No entiendo nada, cada vez tiene menos sentido todo cuanto leo. Será mejor que deje de leer... Me estoy quedando sin fuerzas. Mañana será otro día...

Me quedé completamente rendido y dormido en la cama, esa noche no bajé a cenar y quedaron todos preocupados por lo que me pasaba. Esa misma noche en el hospital donde se encontraba Víctor..

-¡Socorro! ¡Auxilio! ¡Déjame en paz! ¿Quién eres?

-¿Qué es lo que ocurre doctor?

Mientras tanto en el hospital de Uriel...

-No te dejaré solo, debes luchar, tienes el poder confía en ti. Debes confiar. ¡AYUDA!

A la mañana siguiente me levanté y me encontraba muy cansado. Mery me dijeron que había salido temprano a ver a Víctor. Y mientras tanto en el hospital..

-Cari debes de recordar mi pequeño ángel.

-No recuerdo quien eres. Lo siento.

-¿Cómo es posible que no me recuerdes? Si yo soy tu...